La magia de los aceites esenciales actúa relajando alma y cuerpo.
Los aceites esenciales son sustancias muy valiosas que se encuentran en diferentes tejidos vegetales. Los antiguos alquimistas los llamaban “el alma de las plantas”, ya que contienen numerosos compuestos químicos que son naturales, que se extraen de las plantas y que podemos utilizar como remedio casero en diversas situaciones. La aromaterapia es una técnica muy antigua que utiliza estos aceites esenciales con fines terapéuticos, tanto a nivel físico como emocional, ya que estos aceites se encargan de transmitir las propiedades naturales por medio de aplicaciones y tratamientos. A su vez, también se pueden usar en el hogar y en la cosmética.
Cada aceite esencial contiene las propiedades específicas de la planta de la cual se obtiene, cuyos componentes químicos nos servirán para distintas finalidades. Por ejemplo, un aceite esencial puede estimular el sistema nervioso (romero), otros son antibacterianos (tomillo), o con capacidades analgésicas (menta), entre otras. Pero en menor o mayor grado todos los aceites esenciales son antibióticos, regeneradores celulares, antisépticos, inmunoestimuladores, antivíricos, antiinflamatorios, equilibran las emociones o mejoran la circulación sanguínea y linfática. Te invitamos a que conozcas las diferentes propiedades y aplicaciones de los aceites esenciales, en nuestra sección “aceites esenciales” de nuestra tienda online.
MODOS DE EXTRACCIÓN
Existen diferentes métodos para extraer estas sustancias que dependen de la zona de la planta donde el aceite esencial se encuentre más concentrado.
1.- Destilación por vapor: es el método más común y se suele utilizar con plantas relativamente resistentes, cuya esencia se encuentra en partes como las hojas, el tallo, el tronco, etc. Para esto se utiliza un alambique en el que se introduce la parte de la planta que queremos destilar junto con agua. Al calentarse, el vapor arrastra las moléculas volátiles de la planta que van a parar a otro recipiente junto con el vapor. Al enfriarse, la diferencia de la densidad entre el agua y el aceite hace que la esencia quede depositada en la parte superior separada del vapor, ya convertido en agua.
2.- Expresión: este método extrae la esencia de los frutos cítricos, ya que sus aceites esenciales se encuentran en la piel exterior del fruto y para obtenerlos es necesario prensar su corteza.
3.- Maceración: esta técnica consiste en introducir la planta durante algún tiempo en otro líquido hasta que éste captura sus propiedades. Cuando la maceración se hace en aceites vegetales se llama oleato y cuando se hace en alcohol, se llama tintura.
4.- Extracción con disolventes volátiles: esta técnica se utiliza cuando se quiere extraer una parte muy delicada de la planta que no soportaría la destilación por vapor, como por ejemplo, los pétalos de las flores como la rosa o el jazmín. Este proceso es más complejo que los anteriores y se necesita una cantidad enorme de materia prima para la extracción. Por esto, los aceites esenciales obtenidos con este sistema tienen un precio elevado. Consiste en utilizar determinados disolventes que al igual que en la maceración, consiguen que la esencia de la planta quede retenida en ellos. A continuación se elimina la humedad y se obtiene la esencia que en este caso se llama “absoluto”.
MODOS DE USO
Los aceites se pueden usar en el organismo por diferentes vías, por ejemplo por inhalación, a través, de las vías respiratorias, ya que los aceites esenciales son partículas volátiles, es decir, se evaporan. Al ser inspiradas penetran en el organismo a través de los alvéolos pulmonares llegando hasta nuestro torrente sanguíneo. La rapidez y eficacia con la que se incorporan depende de muchos factores, como la intensidad de la respiración, la cantidad de oxígeno que tengamos en la sangre o las particularidades específicas del aceite en cuestión.
En la cavidad nasal tenemos unas células que transmiten la información recibida desde el exterior hasta el cerebro, para que este procese e interprete los estímulos recibidos. Por ello el intenso aroma de los aceites esenciales tiene un efecto inmediato en las emociones y, una de las principales aplicaciones consiste en equilibrar estados de ánimo desordenados o extremos.
Para esto, te recomiendo colocar unas gotas en un pañuelo y olerlo, o bien echar unas gotas en una olla hirviendo, luego te colocas una toalla que cubra tanto tu cabeza como la olla y comienzas a inhalar vapor durante unos minutos. Cuidado con acercarte demasiado a la olla ya que podrías quemarte. Otra forma, es colocar gotas del aceite esencial en un difusor para así llenar espacios como habitaciones u oficinas. Estos difusores ayudan mucho en casos de problemas respiratorios o simplemente para llenar el aire con una fragancia, ayudando a calmar o estimular.
Otro modo de utilizarlos es en compresas frías o calientes. Sirven para aliviar migrañas, dolores de cabeza, fiebre y dolores musculares. Añade gotas de aceite de limón en una fuente de agua, empapa un paño con esta solución y luego lo aplicas en la frente para bajar la fiebre.
Otro método de uso es por absorción, a través de la piel, atravesando las distintas capas de ésta, accediendo a nuestro torrente sanguíneo y difundiéndose por todo el cuerpo. La eminente bioquímica Margueritte Maury fue la impulsora de la aromaterapia y del uso de los aceites esenciales en los masajes terapéuticos. Su línea de trabajo ha sido seguida por la Escuela Inglesa de Aromaterapia, orientada a la belleza y bienestar, que es partidaria de este procedimiento en los tratamientos de aromaterapia.
La epidermis es una de las más beneficiadas con el uso cotidiano de los aceites esenciales, puesto que no solo hidratan y nutren la piel, sino que además la mayoría de ellos son efectivos regeneradores celulares, estimulando el crecimiento celular de las capas más profundas y gracias a la facilidad de absorción de la piel permite que los componentes activos penetren directamente en el organismo. Es importante señalar que debido a su alta concentración no se recomienda aplicarlos directamente sobre la piel sino que a través de una base conductora, que puede ser un aceite vegetal, una crema, arcilla, entre otros.
Debido a que los aceites esenciales penetran las diferentes capas de la piel, llegando incluso a las 7 capas de tejidos que posee el cuerpo humano. Se utilizan tanto en la cosmética, como en los masajes terapéuticos. El Ayurveda utiliza los aceites esenciales disueltos en aceites vegetales tibios, de acuerdo a cada biotipo de la persona para poder eliminar la enfermedad, ayudar a regenerar tejidos, además de provocar e incentivar al paciente por medio de la aromaterapia.
BENEFICIOS DE LOS ACEITES ESENCIALES
El potencial de los aceites esenciales tiene una correspondencia directa con la fitoterapia (que estudia la utilización de las plantas medicinales y sus derivados con finalidad terapéutica) y las propiedades de las plantas medicinales. Pero en general:
- Contrarestan el insomnio
- Reduce el estrés y la ansiedad
- Alivia el dolor
- Ayuda a la depresión
- Aumenta las defensas
- Ayuda a los problemas estomacales crónicos
- Sirve para higienizar una habitación, ropa o artículos personales
- Evita contagios
- Despeja vías respiratorias
- Aumenta las defensas del organismo
- Calma la tos y dolor de garganta
CONSERVACIÓN
Como los aceites esenciales son muy sensibles al calor, la luz y la humedad es importante guardarlos en frascos de cristal oscuro. Como también son volátiles se tienen que cerrar muy bien cuando se usen y sobre todo no se tienen que guardar nunca en botellas de plásticos.
Se deben conservar siempre a temperatura ambiente, aunque los cítricos o de rosa se pueden guardar en el refrigerador, pero para cuando se necesite utilizar se aconseja sacarlos antes para usarlos a temperatura ambiente.
Los aceites esenciales de buena calidad pueden conservarse durante años, aunque varían unos de otros, pero por lo general los aceites cítricos duran 2 años y los de madera se conservan casi para siempre. Los de flores y hierbas duran aproximadamente 3 a 4 años. Esto es en estado puro, sin mezclas, por ello te aconsejamos realizar la mezcla en el momento en que vas a usarlo, es decir te colocas en la palma de la mano la base conductora (crema o aceite vegetal) y le añades unas 2 ó 3 gotas del aceite esencial necesario, lo mezclas y aplicas en la zona a tratar.
Te invitamos a nuestra sección “aceites esenciales” de nuestra tienda online donde puedes encontrar información específica sobre cada tipo de aceite.