Sabemos que Pitta es fuego así como el principio de transformación, donde su energía radica en la primera parte del intestino delgado.
Las personas Pitta tienden a tener el cuerpo caliente, por lo tanto, deben realizar las asanas en un clima frío. Temprano en la mañana es el mejor momento para que practiquen yoga, donde las posturas de pie son las más beneficiosas pues son más frías. El ideal, es que la práctica no se transforme en un entrenamiento fuerte en la que se genere calor adicional en el cuerpo o en el que se produzca la sudoración excesiva. De producirse, se debe compensar el ritmo creado terminando con las posturas y pranayamas de enfriamiento.
Las personas de este dosha serán beneficiadas por las posturas que apuntan a liberar la tensión de la mitad del abdomen, el intestino delgado y el hígado que es donde Pitta se acumula. Las posturas de flexión hacia delante son en general buenas para Pitta porque aportan más energía a la mitad del abdomen. Las asanas con un valor terapéutico, son las que ejercen presión sobre el ombligo, para aliviar el calor.
Dentro de las mejoras posturas para Pitta, el pescado es la mejor asana porque estira los músculos del intestino delgado y ayuda claramente al exceso de Pitta; así como también el arco, la cobra y la barca pues permiten eliminar el exceso de Pitta, especialmente por el flujo descendente del tracto digestivo. Las posturas sobre la cabeza crean Pitta y no deben hacerse salvo si uno sabe compensar el calor que generan. No así las flexiones hacia delante que son buenas en general porque aportan más energía a la zona media del abdomen y tienen un efecto enfriador y de arraigo si se hacen con suavidad.
En definitiva para equilibrar a Pitta, la práctica debe ser calmante, relajante y debe aportar frío al cuerpo, donde mantener la relajación y una respiración suave, lenta y relajada es de particular importancia.
Te dejamos algunas asanas para equilibrar tu pitta
1.- Bhujangasana – Postura de la Cobra
Revitaliza el pecho y los pulmones, los hombros y el abdomen
2.- Dhanurasana – Postura del arco
Estimula los órganos abdominales y el cuello
3.- Paripurna Navasana – Postura de la barca completa
Mejora la digestión
4.- Matsyasana – Postura del pez
Estira y estimula los órganos del vientre y la garganta