El objetivo de reciclar y que lo hagamos ahora, es proteger a las personas y al medio ambiente, a disminuir la extracción de recursos naturales y extender la vida útil de rellenos sanitarios y vertederos.
Sabemos que el cambio climático está pasando y esta afectando al medio ambiente. Medio ambiente en el que vivimos y que de no hacer algo, nuestros hijos y siguientes generaciones no verán más.
Estas son frases que me imagino vienes escuchando hace un tiempo, pero no le das importancia o crees que exageran porque aún no te afecta directamente a ti. Pero es tiempo de que tomemos consciencia que el medio ambiente está cambiando y de no hacer algo la tierra como lugar de vida será para un poco tiempo más.
Debemos respetarla y quererla, y por ello la importancia de la toma de consciencia de nuestras acciones, de comenzar a hacer algo, ya que somos la última generación que puede hacer algo para revertir esta situación. Con sólo pequeños cambios, en nuestros hogares ya estamos contribuyendo a mantener el medio ambiente y al mismo tiempo le enseñamos a nuestros hijos a continuar con esto, a ver que somos parte de la naturaleza y que por lo mismo debemos respetarla. Ella nos ha dado mucho y por lo mismo llegó el tiempo de protegerla.
Hay mucho por hacer, pero ya al utilizar las 3R es un avance: recicla, reduce y reutiliza. En una familia, se genera mensualmente basura que es básicamente papel, cartón, vidrio, plásticos y desechos. Si sólo aprendemos a separarla adecuadamente, antes que se conviertan en basura es posible reducir el 80% del espacio total que ésta ocupa.
Para esto tenemos que entender qué significa “reciclar”: proceso mediante el cual los productos de desecho son nuevamente utilizados y tiene por objeto la recuperación, de forma directa o indirecta, de los componentes que contienen los residuos urbanos. De esta manera podemos prevenir la generación de residuos, aumentando su valorización. Al reciclar los residuos, comúnmente conocidos como desechos, pasan a ser un recurso de valor, ya que se incorporan nuevamente a la cadena productiva como materia prima o energía, y así nada se desperdicia.
La toma de consciencia viene de a poco, pero debemos partir, por ello comienza separando sólo dos o tres residuos en tu hogar. Puedes partir por el papel y las botellas, donde por un lado pueden ir las de vidrio y por otro las de plástico. Para partir no necesitas tener grandes contenedores, sino las ganas de hacerlo y de empezar. Una vez que se te haga el hábito querrás comenzar a ordenarlos para que luego te sea más fácil llevarlos a los puntos de reciclaje. Y esto lo digo por experiencia propia, ya que así fue como partí, poco a poco hasta que ahora me veo separando mi basura, sin pensarlo.
Ahora mi meta va por el compost, es decir de mis residuos orgánicos para volver a utilizarlos en mis plantas y del cual hablaré en otro post. Poco a poco he ido metiéndome en el tema y aunque aún me falta muchísimo por descubrir y aprender, mi cambio de hábitos me pide avanzar un poco más, sin presión sino simplemente porque un paso lleva a otro.
Te invito a cambiar tus hábitos para generar, entre todos, un país más sustentable!
